Emprendiendo en el Bidasoa-Sonia Higueras

«Quiero que todo el mundo se pueda permitir tener flores en casa»

Tras muchos años dedicándose al mundo de la informática ha decidido emprender como diseñadora floral

En este rincón de la calle Santiago se pueden encontrar plantas y flores ‘raras’, principalmente en tonos claros y naranjas. / F. DE LA HERA

De sus recuerdos de infancia Sonia Higueras Río guarda con especial cariño aquellos días en los que ayudaba a su abuela a cuidar las flores de su jardín. Desarrolló entonces su pasión por este mundo, y aunque al crecer tomó un camino profesional muy distinto, hace un tiempo retomó esa afición. Ahora ha abierto su propia floristería, Nia Floral Art, en el número 47 de la calle Santiago de Irun.

–¿Cuál fue el punto de inflexión que te llevó a dar semejante giro en tu carrera profesional?

–Trabajé como informática durante muchos años, porque yo nunca me había imaginado que se pudiera estudiar nada relacionado con las flores. Pero el pasado marzo se acabó el proyecto en el que trabajaba y no estaba muy motivada para seguir en otras cosas relacionadas con la informática. Me apetecía más emprender como diseñadora floral.

«Me gustan los ramos y centros aireados, con movimiento, que no sean compactos»

–¿Qué hiciste entonces?

–Antes del Covid ya llevaba unos años ayudando a una amiga que era wedding planner (organizadora de bodas) con el tema de las flores. También hice algunos cursos de decoración, de interiorismo, etc. Pero ser diseñadora floral me parecía mucho más creativo que el tema de las bodas, así que cuando dejé el trabajo hice la carrera floral en Madrid, que es la formación para obtener el título de florista profesional. Y ahora lo que quiero es desarrollar un estilo propio por el que me identifiquen.

–¿Cuáles son las características de ese estilo?

–Este verano estuve en California y me gustó mucho el estilo que tienen para hacer ramos y centros, que es muy aireado, muy irregular, con mucho movimiento, nada compacto. Los colores allí también son muy vivos y claros, usan mucho blanco. Mientras que aquí en las floristerías normales ves rosas, claveles y poco más. Pero yo cuando voy al mercado en Biarritz cojo lo que me entra por el ojo. Por ejemplo, las flores que más raras me parezcan y que sean en tonos claritos o naranjas siempre me van a gustar.

–Además de flores, en este pequeño jardín que has creado en la calle Santiago también hay plantas.

–Sí, es un tema que también me interesa mucho y en el que me estoy formando leyendo y viendo vídeos. También he querido traer plantas raras, porque si no ves las mismas plantas por todos lados. Por ejemplo, hoy he traído una mezcla bastante rara de la begonia, y también tengo calateas, princesa rosa, monstera deliciosa… Son variantes que han ido creando.

–¿Qué más ofreces en Nia Floral Art?

–Hago arreglos florales para bodas, eventos, hoteles, tiendas… Para todo. También me han solido venir clientas que quieren que les prepare jarrones para sus salones, por ejemplo. Y eso no supone mucho dinero. Es algo que quiero transmitir, porque cuando hablamos de flores parece que siempre te tienes que gastar cincuenta euros. Bueno, si quieres un ramo o centro grande, sí los puedes gastar. Pero para casa puedes hacerte un jarroncito por diez euros, como mucho. Es verdad que la flor de por sí es cara, y los precios no se pueden ajustar demasiado, pero sí quiero que todo el mundo se pueda permitir tener flores en casa por un presupuesto inferior al que estamos acostumbrados.

«Cuando hablamos de flores parece que siempre hay que gastar mucho dinero, y no es así»

–En el ámbito creativo, ¿qué trabajos destacarías?

–Me adapto totalmente, todo se puede hacer con flores. Por ejemplo, tengo el encargo de diseñar un balcón. Es un reto para mí, pero lo cojo con gusto. Iré viendo con la clienta qué quiere, qué plantas son las mejores para ese balcón…También hay una señora que quiere que le ponga nuevas plantas en casa. Y una chica que quiere que le haga un jardín balinés.

–Veo que en apenas dos semanas ha habido bastante movimiento por aquí.

–La verdad es que sí. Y me ha sorprendido que mucha gente ha venido buscando regalos, diciendo que por la zona no hay ninguna tienda de cosas para regalar. Por eso, además de flores y plantas, también voy a tener velas, jarrones de cerámica, postales, papelería, ramitos de flor seca, etc. Y unos pendientes artesanos con forma de flor que hace una chica de Madrid. Todo esto lo iré cambiando, porque no me gusta tener siempre lo mismo, y además quiero que sea un poco exclusivo.

–Me han chivado que además ofreces un bizcocho riquísimo…

–(Ríe) Lo traigo de Donostia, es un bizcocho vegano. Además, tengo una cafetera con café de Sakona y también té chai, para poder tomar aquí tranquilamente, en la mesita o en el banco que tengo. Cuando hace bueno lo saco fuera. De hecho, hay un señor que suele venir a tomar café.

–¿Qué otros planes tienes para el negocio?

–Voy a ofrecer talleres. Los primeros serán el último fin de semana de noviembre. El sábado 26 será para niños, haremos coronas pequeñas. Y el domingo 27 para adultos, para hacer una corona otoñal con hojas y ramas, en principio con hortensia seca. Voy a hacer ejemplos y los subiré a Instagram (@niafloralart) para que la gente vea qué vamos a hacer.

–¿En qué horario podemos encontrarte en la tienda?

–Abro todos los días, excepto los martes y jueves por la tarde, que solo abro de 16.00 a 17.30, y los domingos por la tarde, que es mi momento para descansar.

No hay comentarios

Lo sentimos, no se pueden realizar comentarios para este post.

Follow by Email
RSS